“Cháke” es una interjección de advertencia en guaraní muy usada en Paraguay, equivalente a “cuidado” o «atención». También se puede decir “háke”.
Ambas expresiones se utilizan para indicar algún peligro inminente o también para proferir advertencias o amenazas. Por ejemplo: «¡Cháke, esa víbora!» o bien: «no te metas conmigo, cháke, te voy a castigar». Es muy popular también: «Háke ou» (cuidado, que viene).
Un ñe’enga (refrán popular) que usa el término es: «Cháke kóa, he’i irrevolver ramóa» (cuidado con esto, diría aquel que tiene un revolver nuevo). Otro dice: «cháke mbói, he’i ju’i» (la rana dirá: cuidado, la víbora).
Además, otro dicho e pone la expresión en boca de los personajes mitológicos: «Háke póra, he’i Pombero omondýiramo Luison-pe» (Cuidado con el póra, dice el Pombero, cuando quiere asustar al Lobisón).
El padre Saro Vera (en su libro «El Paraguayo, un hombre fuera de su mundo») recoge un dicho de advertencia en el ámbito político: «Eñeñangarekókechuguí; háke colorado pyahú hina«. Traducido sería: Cuidate de él, porque es un colorado nuevo.
En este caso, describe al nuevo afiliado al Partido Colorado, agrupación que domina el poder desde hace varias décadas en Paraguay. Quiere indicar que el nuevo converso es un tipo de cuidado, un peligro para los demás.
Pero también puede usarse simplemente como una amenaza vana; algo dicho con el solo fin de causar miedo, pero sin ninguna posibilidad de concretarse. Por ejemplo: «les tiene con el cháke permanente». En el sentido de que son puras bravuconadas para impresionar.
Por otra parte, una forma peculiar de advertir en Paraguay es diciendo: «Cuidadito«. Usan desde las madres para tratar de disuadir a sus hijos, así como en cualquier otra conversación áspera entre las personas.