“Kure akãngue” significa cabeza de chancho sacrificado. En el lenguaje coloquial paraguayo se refiere a las personas que “andan de la oreja”.
Esto se refiere habitualmente a quienes no consiguen “permiso” de sus parejas para salir de la casa. El dicho proviene de la costumbre de tomar la cabeza del cerdo de las orejas durante la faena.
”Oiko inambígui” (vive sujetado de la oreja), es la expresión habitual para referirse a las personas dominadas por sus parejas excesivamente posesivas.
Otras diversas alusiones -todas burlescas- se utilizan en el guaraní y el jopara de Paraguay.
Por ejemplo, se les dice “sãmbyky” (de cuerda corta), “permiso’i” (de escaso permiso), “lorito óga” (loro hogareño), “plancha eléctrica”, “churero parlante”, etc.