“Alonsito” es el nombre preferido en Paraguay para referirse al hornero. Se aplica comúnmente en forma burlesca al hombre que reconoce como propio al hijo ajeno.
Es por la fama del ave de alojar supuestamente en su casa a crías que no son suyas. Sin embargo, el alonsito no es necesariamente hospitalario. Lo que hace cuando algún animal invade su casa es tapiarlo y dejarlo encerrado.
El hornero es también conocido como tiluchi, casero o juan del barro. El ave no trabaja los domingos y construye un nido cada año. Su nombre científico es Furnarius Rufus.
Antiguamente, era más difícil determinar un caso de «alonsito», por lo que los juicios al respecto pasaban más por las consideraciones algo subjetivas del parecido físico o no.
En cambio, con el advenimiento de las pruebas de ADN, la determinación precisa de la paternidad puede despejar cualquier duda. En algunos países, los test de paternidad con resultados negativos llegan hasta el 30%.
Nuestro colaborador Pedro Achar aporta una frase relacionada: «Onace vaekue nde kokuépe ja nde mba’ema» (Lo que nace en tu chacra es tuyo). Generalmente la expresión se utiliza «para ofender jocosamente al padre de una criatura que no se le parece», explica.