«Ehasána ko raya eñanimáro» se traduce como: pasá esta raya, si te animás. En un desafío, alguien traza una marca en el suelo e incita al otro a que lo traspase. El término «animarse» se utiliza en varias provocaciones o bravuconadas.
Por ejemplo:
«Ejúna eñanimáro». Significa, vení si es que te animás.
«Epokóna eñanimáro». Tocá, si te animás, A veces se desafía puntualmente que la otra persona se atreva a tocar la oreja del que está desafiando. En ese caso, diría: «Epokóna che nambíre eñanimáro». Otraz veces, el desafío puntual es que moje la oreja del oponente. «Emyakýna che nambi eñanimáro». Mojá mi oreja, si te atrevés.
«Ere jeýna la ere va’ekue». Repetí lo que estabas diciendo. La frase intenta medir la valentía de alguien que lanzó una expresión ofensiva. Lo incita a que vuelva a decir el insulto, si es tan valiente.
«Ehasana che ári eñanimáro». Pasá encima mío, si te atrevés. El que lo dice está totalmente predispuesto al bochinche.