«Ñaña» de maldad; se aplica al malo o a la mala. Por ejemplo, se dice: Fulano o fulana iñaña (es malvado o malvada).
El término es de uso muy extendido, incluyendo en las letras de varias canciones muy populares.
Emiliano R. Fernandez utiliza en varios poemas, incluso tiene uno titulado «Causa ne ñaña». Por otra parte, en Guavira poty, dice: «Eju che kambá che mongéra irûva/Ani ne ñaña Guavirá Poty» (ven, mi morena, compañera de mis sueños/no seas mala flor de guavira).
Otra polca, «Che mba’embaysy», de Elenita Duarte Nunes, también refiere: «Morena, mi morenita, ejumi jevýna/ma´erãiko la ne aña péicha chendive» (morena, mi morenita, regresa/por qué eres así de mala conmigo).
El término hasta se ha convertido en verbo en el lenguaje coloquial: «ñañasear» (significaría hacer maldades). Hasta se escucha «ñañasismo» (maldad).
Para más detalles ver también: «ñañala«.