«Nereme’êi va’erâ luz kavaju piru ári» significa: No tenés que dar ventaja si vas a competir sobre un caballo flaco. Dar luz quiere decir dar ventajas. El ñe’enga advierte a los más débiles sobre la inconveniencia de hacer concesiones a un adversario más poderoso.
Por otra parte, el concepto de «kavaju» es sinónimo de candidato. Por ejemplo, en época de elecciones, las personas hablan de que tal postulante es su caballo; es decir su apuesta. En ese contexto, se usa la frase «kavaju piru» (caballo flaco) para referirse a un candidato con escasas posibilidades.
En contraposición, está el «caballo de comisario», que habitualmente tiene todo el apoyo para salir exitoso en la contienda. Además, para referirse simplemente a un equino de excelente capacidad se dice «kavaju porâ» (caballo bueno) «kavaju vale» (caballo de gran valía) o bien «kavaju katupyry» (caballo habilidoso).