«Tatu de oro» quiere decir vagina de oro, una manera de resaltar su importancia. Habitualmente se refiere a la mujer que se da aires de grandeza.
Suele referirse a la que se muestra envanecida supuestamente por la categoría lograda por su órgano sexual. El refrán dice: “oñembo hepy ha’ete ikachi de oro” (se hace de la cara como si tuviera vagina de oro).
Luego, abundan expresiones del tipo: «¿itatu de oro mba’e pio?» (¿acaso tiene concha de oro?), «ndaipóri tatu de oro» (no hay vagina de oro), «dejá de hacerte la tatu de oro», etc.
Es también frecuente que los hombres rechazados, en su pichadura, utilicen el término con frases como: «se cree la tatu de oro», «¿moopio oñembo tatu de oro chéve hina?» (de donde se me hace la que tiene concha de oro).
En lugar de “tatu”, suele usarse también “kachi”. Es sinónimo de kachi de oro y lo contrario de kachi de lata.