“Se fue todito” significa que alguien cometió un error descontrolándose totalmente, se puso en evidencia completamente. Es decir, no hizo ningún intento por disimular o evitar una situación que le expuso claramente ante los demás, sin atenuantes.
Generalmente son equivocaciones irreversibles. Por ejemplo, si alguien estando ebrio empieza a hablar sin filtro y comete el famoso “sincericidio”. Las barbaridades dichas en esa situación ya no se pueden arreglar.
También “se fue todito” quiere decir que perdió los estribos y cometió en consecuencia actos a todas luces irracionales. Asimismo, puede referirse a un error grosero (“ojapiro imàtare”), o bien meó totalmente fuera del tarro (“tuicha okuaru karê”), “omondoro paite” (rompió todo), etc.