Empleador seco. Un patrón sin dinero merece ser escarmentado, según el refranero. Expersa su condena de la siguiente manera: “Patrón sogue ha kavaju parejero oipo’onte vaerâ voi sábado ka’aru” (El patrón sin dinero y el caballo de carrera debe nomás luego ser golpeados un sábado a la tarde). Haimete ha’u la che patrón ho uva, he i mbya ho uramo suero.