«Sâmbyky» se dice al que tiene la cuerda corta. El hombre o la mujer que no suele tener permiso de su pareja para salir.
Es un motivo de burla muy frecuente en las rondas de amigos. En general, este tipo de chanzas se producen más entre los hombres y es menso frecuente entre las mujeres.
El término «sâmbyky» es lo contrario de sâmbuku (cuerda larga). En juego de palabra se dice “Sâmbyky, el santo de los dominados”.
“Kure akãngue” (cabeza de chancho) es un apodo o marcante aplicado en el mismo sentido a los que andan de la oreja.
También se dice «sâmbyky, plancha eléctrica», según acota el periodista Juan José Benítez, de Paraguarí. Como es sabido, la plancha eléctrica tiene una cuerda corta.
Otros también le dicen: Jarro lata, porque oiko inambígui (jarro de lata, porque se le tiene de la oreja).
Ver también: permiso’i o churero parlante.