Dinero de la alcancía. Un ñe’enga popular hace una simpática comparación entre los billetes ahorrados en estos recipientes con el aspecto de las personas: “Arriéro rova cha’î pláta alkansía” (hombre de rostro arrugado como el dinero de la alcancía).
Otros dicen: “arriero rova cha’î mortadela revi” (hombre de cara arrugada como culo de embutido). “Mba’e rova cha’î acordeón” (de rostro arrugado como el acodeón), “Rova cha’î milanesa” (arrugado como milanesa), son otras comparaciones frecuentes.
También se les “rova moñái” (personaje mitológico monstruoso) y se relaciona a los de rostro arrugado con el cuajo y el kamby rova (nata).