«Facturera» se denomina a la mujer que recibe emolumentos por sus servicios sexuales. Si bien obviamente las personas dedicadas a este menester no tributan en Paraguay, el término se ha popularizado y se ha vuelto muy común llamarlas «facturera», «banda», etc.
El uso popular del término también ha derivado en expresiones como «facturar» como sinónimo de tener relaciones sexuales a cambio de dinero. «Fulana factura», es una indicación de que la persona se dedica al trabajo sexual.